jueves, 12 de junio de 2014

En la búsqueda del necro-sonido. Parte I

Todo lo que el hombre siente y piensa es propenso a ser expresado en la
música, incluso nuestra fascinación y ofuscamiento ante el misterio
inasible de la muerte.
       El odio, la nostalgia, lo demoniaco y la pulsión suicida han encontrado
múltiples formas de expresión en la intrincada historia del arte. En el
terreno de la música contemporánea la vía oscura tiene una notable
efervescencia. De manera temática y buscando un sonido más violento y
contundente, Black Sabbath rompe con los parámetros del rock para
cimentar el Heavy Metal con su trascendente disco Paranoic (1970). En
otras regiones inglesas el punk pare su parte más densa, introvertida y
melancólica en el post-punk de estilizada sombra (expresionismo
sofisticado) en sus exponentes más sobresalientes como Joy Division,
Bauhaus y Sisters of Mercy (herederos de David Bowie, Iggy pop and the
Stooges y Velvet underground). Con una crudeza más evidente, con
verdadera hambre de sombra, las agrupaciones:
      Venom, Bathory, Hellhammer y Celtic Frost lograron un sonido que
traspasaba el terror humorístico de otras agrupaciones. La distancia con
el ritmo Heavy Metal llegó a un punto sin retorno.
       Con éstas influencias fundamentales es que, en el crepúsculo
ochentero, agrupaciones como Mayhem, Salem, Darktrhone, Burzum,
Morbid, Sarcófago, etc., le dieron, finalmente, voz y sonido propios al
Black Metal (expresionismo crudo).
   


















     
      Más allá de las complejidades técnicas en guitarras, bajo y batería,
para obtener un sonido apabullante y seco, las bandas negras recurrieron
a diferentes estímulos y plataformas que incluyeron incursiones en los
recursos de la música electrónica, efectos sonoros y mejoras de
grabación y producción que encontraron bajo el amparo de disqueras que
vieron, en el fenómeno naciente, una oportunidad para hacer plata. Sin
embargo, es Varg Vikernes el personaje que en ese momento, 1991, está
pensando agudamente el sonido al que debe aspirar un Black Metal de
cariz subterráneo. En el documental Until The Light Takes Us (2009) Varg
explica que él (Burzum) y los integrantes de Mayhem y Darktrhone
conspiraban, en la sordidez de la legendaria tienda Helvete, para
arrancarle a la música el necro-sonido: una bomba sensitiva que dejara al
escucha en el extrañamiento y la repulsa sin lugar para el reposo. Shock
trepidante y melódico con la carga de frialdad que caracteriza a la
atmósfera noruega.
       Y Varg lo hizo, mas el asesino de Oysten “Euronymus” Aarseth no lo
inventó directamente, en cambio, tuvo la perspectiva idónea para darse
cuenta de que el necro-sonido estaba ya ahí y no eran conscientes de
ello. Estaba en Mayhem y en Darkthone que habían grabado sus primeros
demos con un presupuesto de producción casera, pobre.
El engreído “Cont Grishnackh”, su otro seudónimo, llevó al límite el
descubrimiento: para grabar los segmentos de su Demo 1 pidió el peor
de los micrófonos y un amplificador viejo. El productor no hizo nada por
mejorar la calidad de la grabación, escucharon el demo ensamblado y
entonces la oscuridad le dio claridad a Varg: El necro-sonido no sólo
desafiaba los estándares del buen gusto musical por su estridencia,
crudeza, vértigo y violencia, también era una postura ante los criterios de
la «buena producción o grabación». El mensaje quedó claro: el Black
Metal no podía ser una música que apostara por granjearse en el gusto
de la masas ni su fin sería obtener el beneplácito de las grandes
disqueras. La mira del Black Metal no estaba puesta en el exterior, para
Varg, y muchos otros, el necro-sonido representó la puerta para explotar
todas las posibilidades de un arte siniestro. Con el necro-sonido se logró una doble aportación: Sentó los valores del Black Metal clásico y, por otra parte, sería el punto de arranque del Black Metal Noruego, sonido primordial para el desarrollo de miles de bandas en el mundo. Ambos
estilos buscan ser leales a sus principios estéticos e ideológicos sin dejar de trascender lo técnicamente logrado.
       En lo que respecta al proyecto Burzum, su búsqueda del necro-sonido se expandió a los terrenos etéreos del Ambient con resultados notables, situándose también como uno delos compositores de Black Ambient más sobresalientes de la escena nórdica y mundial.

                                                                                   Silas Mesulam







foto a) Varg Vikernes

foto b) Demo 1 de Burzum

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